Sorpresas te da la vida,
sorprendido, por no decir desilusionado,
no me importa quien es quien,
hay que ser feliz, aunque yo particularmente,
no estoy de acuerdo con eso,
y mi religión me lo prohíbe;
pero siempre estaré enamorado,
de tu lindo rostro, de tu bella sonrisa,
y de tu espontánea alegría.
Si te pones brava, ya se te pasará.
Yo siempre creo, y confío en tí,
y siempre tendrás un lugar en mi corazón.
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