3 Piñas + 1: Cuentos Cortos - Una Historia Real

Después de casi un año, al fin pude sembrar las pequeñas plantas de piña,
que con cariño  y dedicación,  estaba cultivando (criando) desde  hace un
tiempo ya.   Han sido  meses de esfuerzo  y cariño,   por  éstas  pequeñas
 plantitas,  que al fin  ven cumplidos  sus sueños de ser transplantadas a un
buen lugar,  donde puedan crecer lo necesario  para dar fruto y prosperar.
Preparé  el terreno,  abri las zanjas,  y  sembré  a las pequeñas maticas de
 piña,  para que dentro de 9 o 12 meses,  frutos nos puedan dar. Se las veía

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 deseosas  y  felices,  después de  tanta espera, viendo que  sus  sueños se
 hacían  realidad,  hasta la plantita mayor me mostró su cariño,  cuando se
 inclinó  hacia mis brazos,  cuando estaba en el proceso de extraerla de  su
matero.  He leído  que las plantas  còmo  seres vivos,  también  sienten  y
 sufren,  y creo que es así.  Aunque lo hago por interes personal, me alegra
 que mis pequeñas plantitas, se sientan bien. Las plante en Domingo, en la
 fase  lunar  del cuarto menguante,  cómo   me explico mi mamá, para que
 crezcan  con  buen  pie.   Ahora,  a  cuidarlas  y  regarlas  todos  los  días.

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